domingo, 19 de abril de 2009

Entre los juncos con Oggi


Y cambio el clima no más… Años anteriores y Tóxica no me dejará mentir, una buena llovizna acompañada de un mejor viento trasformaría a un domingo cualquiera en alguno de los números cruzados trazados por el dramatismo rayuelario. Pero aunque nos propongamos renegar sobre eso, pasan muchas cosas raras cuando el clima cambia de esta manera en nuestra área subtropical, así definida por el peronisimo Consultor Chaqueño.
A mi, me dejaron de dar ganas de dar caminatas con mi piloto mimesis Oliveira y me entran unos antojos excesivos de andar en bicicleta. Si fuera mujer y estuviera embarazada, mi hijo tendría cara de corneta.
No acompaño esta noche, como lo hacía antes escuchando a Edith Piaf, ni nada de Bossanova, ni siquiera escucho algo en lo que casualidad intervenga algún instrumento acústico, ni nada de eso que lo teletransportaría señor/a lector/a a una necesaria angustia pasada, sino que Machito me aconseja que me ponga a brincar, aunque solo, así como estoy no tiene mucho sentido.
Y después de hacer un zapping, me preguntaba que haría Oggi Juntos un día como este. Lo mostraban diciendo que se aburre de todo, que cinco minutos en no se que programa ya lo aburrían. ¿Se miraría al espejo dándose cuenta de que su cara es un ejemplo de escultura quirúrgica? Se me hace que un día como hoy, muchos y muchas se dan cuenta de que si siguen asistiendo al mismo cirujano, van a ser cada vez más parecidos, indiferenciables. Y por supuesto, lo celebran, me gustaría brindar con ellos y ellas.
Es como si reformaran caras en serie, como poner condones en sobres, pero más específicamente silicona y botox en una línea de embalaje donde los cuerpos circulan. Eso es picardía, seguir generando escándalos aunque sepas que te van a confundir con Moria y por ende sumás puntos para otro ícono.

0 comentarios: